Seguir el camino del desarrollo de los derechos humanos con peculiaridades chinas en firme impulso de la causa de los derechos humanos tanto de China como del mundo

Fuente:Renmin Ribao | Autor:Wen Yan | Actualizado el:2025-09-12

Seguir el camino del desarrollo de los derechos humanos con peculiaridades chinas en firme impulso de la causa de los derechos humanos tanto de China como del mundo

―Estudio de Sobre el respeto y garantía de los derechos humanos (Xi Jinping)

El pleno disfrute de los derechos humanos por todos es un gran sueño de la sociedad humana. Desde el XVIII Congreso Nacional del Partido, su Comité Central, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, ha insistido en situar en lo más alto los intereses del pueblo, ha tomado como objetivo de lucha la aspiración de este a una vida mejor y ha elevado sin pausa el nivel de respeto y garantía de los diversos derechos básicos del pueblo chino, con todo lo cual ha impulsado a enormes éxitos la causa china de los derechos humanos y ha hecho importantes contribuciones a la del mundo. El recién publicado libro Sobre el respeto y garantía de los derechos humanos (Xi Jinping), en adelante denominado simplemente “el libro”, en el que se recogen de manera sistemática los importantes discursos concernientes del secretario general Xi Jinping, reviste un relevante significado orientador para que sigamos avanzando por la vía del desarrollo de los derechos humanos con peculiaridades chinas, garanticemos los derechos humanos del pueblo chino en un nivel más alto y promovamos la formación de una gobernanza global de derechos humanos más justa, razonable e inclusiva.

 

I. El Partido Comunista de China y el Gobierno chino siempre respetan y garantizan los derechos humanos

El año 2021 marcó el centenario de la fundación del Partido Comunista de China (PCCh). Los cien años del PCCh son cien años de lucha por los derechos humanos y de respeto, salvaguardia y desarrollo de los mismos. La lucha centenaria del Partido ha cambiado radicalmente el porvenir y destino del pueblo chino, ha elevado enormemente el nivel de civilización tocante a los derechos humanos y la civilización en China y ha enriquecido y desarrollado la diversidad de la civilización humana. En la primera parte del libro, el secretario general Xi Jinping hace una profunda exposición de las contribuciones y logros históricos del PCCh y del Gobierno chino en cuanto al respeto y garantía de los derechos humanos.

Desde la época moderna, la invasión de las potencias occidentales y la corrupción de la dominación feudal, que convirtieron poco a poco a China en una sociedad semicolonial y semifeudal, arrojaron a la nación china a una catástrofe sin precedentes y dejaron al pueblo chino oprimido y esclavizado, y sumido en un profundo sufrimiento, con su derecho a la vida gravemente pisoteado y su dignidad humana aún más difícil de salvaguardar. Está justamente indicado por el secretario general Xi Jinping: “Los sufrimientos padecidos por el pueblo chino desde la época moderna le han dado un hondo entendimiento de lo mucho que los valores de la persona, sus derechos básicos y su integridad y dignidad significan para el desarrollo y progreso social”. Ante la fragmentación y destrucción del territorio nacional, así como el hundimiento del pueblo en un abismo de miseria, el pueblo chino se alzó a la resistencia; gente de elevados ideales peregrinó concienciando a las masas populares; surgieron uno tras otro el Movimiento del Reino Celestial Taiping, el Movimiento de Occidentalización, el Movimiento Reformista de 1898 y el Movimiento de Yihetuan, y salieron a la luz alternativamente toda clase de proyectos de salvación nacional, pero todo ello terminó por fracasar, incapaz de salvar al pueblo chino de la trágica situación de opresión y esclavización. Así que la pesada misión de materializar la independencia nacional y liberación popular, y la prosperidad y fortaleza del país y la felicidad del pueblo recayó históricamente en el PCCh.

El secretario general Xi Jinping indica que la feliz vida del pueblo es el mayor de los derechos humanos. Desde el mismo día de su fundación, siempre tomando como aspiración fundacional y misión la persecución de la felicidad del pueblo chino y la revitalización de la nación china, el PCCh ha unido y liderado a este pueblo en prolongada y ardua lucha en pro de crearle una vida mejor. El Partido dio cohesión y guía al pueblo en orden a derribar las tres grandes montañas ―el imperialismo, el feudalismo y el capitalismo burocrático―, fundar la República Popular China y lograr la independencia nacional y liberación popular, y la más amplia democracia popular en un país con miles de años de historia como sociedad feudal, con lo que el pueblo se volvió el verdadero dueño del país, de la sociedad y de su propio destino, en orden a emprender la revolución socialista y promover la construcción socialista, sentando la premisa política fundamental y los cimientos institucionales sólidos para la garantía de los diversos derechos y libertad del pueblo, y en orden a promover la reforma y apertura, y la modernización socialista, lo que sirvió de ayuda para crear un prodigio de rápido desarrollo socioeconómico y uno de estabilidad social duradera, y para dar impulso al gran salto de la nación china de su puesta en pie a una modesta prosperidad, con todo lo cual la vida de los cientos de millones de chinos ha mejorado día a día y la causa china de los derechos humanos ha cosechado enormes éxitos mundialmente llamativos.

A partir del XVIII Congreso Nacional del Partido, el socialismo con peculiaridades chinas entró en una nueva era. Las tareas principales que afrontaba el Partido entonces eran cumplir el objetivo de lucha fijado para el primer centenario [el del Partido, en el 2021] e iniciar la nueva expedición para alcanzar el establecido para el segundo centenario [el de la Nueva China, en el 2049], con el fin de avanzar rumbo al grandioso objetivo de hacer realidad la gran revitalización de la nación china. El secretario general Xi Jinping hace la indicación de que el sueño chino es un sueño tanto de la nación china como de cada uno de los chinos. El proceso de cumplimiento del sueño chino de la gran revitalización de la nación china llevado por el pueblo chino es esencialmente un curso de materialización de la equidad y justicia social y de promoción incesante del desarrollo de la causa de los derechos humanos. El Comité Central del Partido, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, ha persistido en la primacía del pueblo, ha situado siempre los derechos de este en primer plano y le ha asegurado su derecho a una participación y un desarrollo equitativos, de modo que los frutos de la reforma y del desarrollo le beneficien a todo él en mayor medida y más equitativamente, y que se eleve sin pausa el nivel de respeto y garantía de los diversos derechos básicos del pueblo chino.

Bajo el firme liderazgo del Comité Central del Partido, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, se han implementado plenamente de forma sucesiva los tramos 2012-2015 y 2016-2020 del Plan Estatal de Acción de Derechos Humanos, haciéndose realidad su acoplamiento y armonización con los programas estatales de desarrollo. Y, particularmente a través de la ininterrumpida lucha de todo el Partido y el pueblo de todas las etnias del país, hemos cumplido en fecha prevista los objetivos y tareas planteados para librar la batalla decisiva del acometimiento de lo más duro en la liberación de la pobreza, con lo que hemos logrado alcanzar el objetivo de lucha fijado para el primer centenario, hacer realidad la culminación de la construcción integral de una sociedad modestamente acomodada en el extenso territorio chino, resolver históricamente cuestión de la pobreza absoluta, dejar escrito un nuevo capítulo en la causa china de los derechos humanos y crear un prodigio humano del respeto y garantía de estos. Se trata de un hito de la causa de los derechos humanos no ya solo de la propia China, uno digno de figurar en los anales de la historia, sino también del mundo, uno de importancia. ¡El secretario general Xi Jinping señala que esta es una gran gloria de la nación china, del pueblo chino y del PCCh!

El secretario general Xi Jinping indica que en cuestión de derechos humanos no hay nada de “pretérito perfecto”, sino solo la forma de “gerundio”. Estamos avanzando con desbordante vigor hacia el objetivo de lucha fijado para el segundo centenario: culminar la construcción integral de un poderoso país socialista moderno. En la “Explicación sobre la ‘Propuesta del CC del PCCh para la elaboración del XIV Plan Quinquenal de desarrollo económico y social y los objetivos de largo plazo para 2035’”, aprobada en la V Sesión Plenaria del XIX Comité Central del Partido, se han tomado como importantes objetivos del desarrollo socioeconómico “el impulso del desarrollo integral de las personas y el progreso cabal de la sociedad” y “la promoción del desarrollo integral de la causa de los derechos humanos”. En conexionamiento con ello, en septiembre de 2021 se promulgó el tramo 2021-2025 del Plan Estatal de Acción de Derechos Humanos. En el nuevo punto de partida y la nueva expedición, el Partido dará al pueblo cohesionamiento y guía en cuanto a la comprensión de la nueva etapa del desarrollo, la aplicación de la nueva concepción del mismo, la estructuración de su nueva configuración y la promoción del desarrollo de alta calidad, todo en continua e incansable procura de una vida más feliz y segura, y unos derechos humanos de un más alto nivel. El secretario general Xi Jinping recalca que el pueblo chino vivirá una vida aún más feliz y verá más plenamente garantizados sus derechos, y China hará mayores contribuciones al desarrollo y progreso de la humanidad.

 

II. Hay que marchar por un camino de desarrollo de los derechos humanos ajustado a las condiciones nacionales de China en garantización de la condición del pueblo como dueño del país

El secretario general Xi Jinping señala que, al tiempo que la democracia y los derechos humanos son aspiración común de la humanidad, hay que respetar el derecho del pueblo de todo país a elegir soberanamente su propia vía de desarrollo. En la segunda parte del libro, él expone a fondo el criterio de juicio de la democracia y los derechos humanos, haciendo hincapié en la persistencia en combinar con la realidad de China el principio universal de los derechos humanos, abriendo una vía de desarrollo de estos ajustada a sus condiciones nacionales, en garantización de la condición del pueblo como dueño del país.

En la cuestión de los derechos humanos no hay actuación inmejorable, sino actuaciones mejores. El secretario general Xi Jinping indica a fondo que no existe en el mundo una vía de desarrollo de los derechos humanos única aplicable universalmente, ninguna garantía de ellos es la mejor, sino una mejor. Enfatiza que nuestro desarrollo de los derechos humanos no se basa en el estándar propuesto por Occidente. Sea la que sea la etapa de desarrollo en que nos hallemos, nuestra causa de los derechos humanos debe desenvolverse de acuerdo con las condiciones nacionales de nuestro país y los requerimientos del pueblo, y será buena si alcanza las metas y niveles que hemos establecido, sin necesidad de que nos pongamos a la par de Occidente ni de que este nos juzgue. ¡Firme rechazo a las palabras y acciones de reproche de los países occidentales en la cuestión de los derechos humanos de nuestro país!

Hay que seguir un camino de desarrollo de los derechos humanos con peculiaridades chinas. Desde el término de la Guerra Fría, los países occidentales han intervenido en los asuntos internos de los demás so pretexto de la cuestión de los derechos humanos, estando una parte de ellos dando tumbos bajo su manipulación hasta quedar irreconocibles, algunos desintegrados, algunos en la vorágine de la guerra, otros con desórdenes diarios. ¡Cómo imaginar, en esta cuestión, en qué acabaríamos si modificásemos nuestra práctica con el sistema de valores del capitalismo occidental y midiésemos el desarrollo de nuestro país con su sistema valorativo, afirmando lo ajustado a los estándares occidentales y tildando de atrasado y anticuado lo que no y, por consiguiente, criticándolo y atacándolo! El secretario general Xi Jinping indica que el único con más derecho a expresarse sobre qué tipo de camino debe seguir un país es su pueblo. Una receta no puede curar todas las enfermedades y un modelo tampoco puede resolver los problemas de todos los países. Todo lo que un traspaso forzado o imposición a los demás puede ocasionar es desacomodo. El secretario general Xi Jinping hace profundas exposiciones en distintas ocasiones y desde diferentes perspectivas sobre cómo transitar con perseverancia un camino de desarrollo de los derechos humanos con peculiaridades chinas. Destaca que están los tiempos desarrollándose y los derechos humanos progresando. Tenaz en combinar el principio universal de los derechos humanos con la realidad contemporánea, China marcha por una vía de desarrollo de ellos acomodada a las condiciones nacionales, sigue una noción de los derechos humanos centrada en el pueblo, considera como derechos humanos básicos primordiales los derechos a la vida y al desarrollo, fomenta de forma coordinada los derechos económicos, políticos, sociales, culturales y ambientales del conjunto del pueblo, salvaguarda con empeño la equidad y justicia social y promueve el desarrollo integral de las personas.

Hay que desarrollar la política democrática socialista. Los derechos democráticos constituyen parte importante de los derechos humanos, y el desarrollo de la política democrática socialista significa encarnar la voluntad del pueblo, garantizarle sus derechos e intereses, activar su vigor creativo y asegurarle su condición de dueño del país mediante el sistema institucional. En cuanto al estándar de juicio de la democracia, el secretario general Xi Jinping hace la profunda indicación de que las formas de cumplimiento de ella son ricas y diversas, no pueden ceñirse rígidamente a un modelo estereotipado, no se puede ni mucho menos afirmar que solo haya un estándar aplicable universalmente. El juicio de si un país es democrático, lo debe ejercer su propio pueblo, no los arbitrios gesticulantes de un puñado de gente de fuera. No es de por sí democrático medir con un criterio único los ricos y multicolores sistemas políticos del mundo, escrutar con visión monocorde la variegada y abigarrada civilización política de la humanidad. Él subraya la necesidad de seguir sin titubeos el camino del desarrollo político del socialismo con peculiaridades chinas; ejercer un duradero mantenimiento, cabal aplicación y constante desarrollo del sistema de asambleas populares, el de cooperación multipartidaria y consultación política bajo la dirección del PCCh, el de autonomía étnica territorial y el de autogobierno de las masas en los niveles de base; desarrollar la democracia consultiva socialista; consolidar y desarrollar un frente único patriótico lo más amplio posible; procurar una más amplia intervención ordenada de las masas populares en la política, y garantizarles a ellas una extensa participación en la gobernación del país y en la gobernanza social, conformando con ello un panorama político dinámico, animado, estable y cohesionado.

Hay que desarrollar activamente la democracia popular de proceso entero. A partir del XVIII Congreso Nacional del Partido, con profundización del conocimiento de las leyes objetivas del desarrollo de la política democrática, el Comité Central, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, ha planteado el importante concepto de democracia popular de proceso entero. El secretario general Xi Jinping indica que la democracia de este tipo de nuestro país tiene un procedimiento institucional y también una práctica participativa completos y, por su lograda combinación de una democracia de procesos con una de resultados, de una de orden procedimental con una de orden substantivo, de una directa con una indirecta y de la democracia popular con la voluntad estatal, es una democracia de cadena completa, ejercida en todas las direcciones y de cobertura total, la democracia socialista más amplia, auténtica y eficaz. Él pone énfasis en que debemos seguir promoviendo la construcción de la democracia popular de proceso entero, haciendo que la condición del pueblo como dueño del país se plasme concreta y realmente en las políticas y medidas del Partido referentes a la gobernación del país y el manejo de los asuntos administrativos, en las labores de todos los aspectos y niveles de los órganos partidarios y estatales, y en los trabajos que den concreción a la aspiración del pueblo a una vida mejor.

 

III. Hay que perseverar en la consideración del pueblo como el centro en impulso de un desarrollo integral de la causa de los derechos humanos

A partir del XVIII Congreso Nacional del Partido, su Comité Central, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, ha dado promoción a un desenvolvimiento integral de la causa de los derechos humanos actuando en acomodo al cambio de la contradicción principal de nuestra sociedad, en adhesión a la concepción del desarrollo centrada en el pueblo, en otorgamiento de importancia primordial a garantizar el derecho del pueblo a la vida y al desarrollo, en consideración como punto de partida y de llegada de este el bienestar del pueblo, la garantía de su condición de dueño del país y la promoción del desenvolvimiento integral de las personas, y en incentivación de los derechos humanos con el desarrollo. A lo largo de este proceso, el secretario general Xi Jinping ha planteado una serie de nuevos conceptos, ideas y exigencias, y las partes tres a ocho del libro dan plena manifestación al respecto.

Hay que aplicar la concepción de los derechos humanos centrada en el pueblo. El pueblo es el creador de la historia, servirlo de todo corazón es el propósito fundamental de nuestro Partido, y el logro de que el desarrollo sea para él y se apoye en él, que sus frutos sean compartidos conjuntamente por él, es el propósito fundamental de nuestro impulso de la reforma y la apertura y de la modernización socialista. El secretario general Xi Jinping indica que el PCCh tiene en el pueblo sus raíces y su flujo vital; la fuente mayor de posesión del poder por parte de nuestro Partido, cimiento sólido de nuestra República Popular y raíz para que fortalezcamos el Partido y revigoricemos el país es el pueblo; el país es el pueblo, y el pueblo es el país; en la conquista y preservación de un país, lo que se debe hacer es preservar el corazón del pueblo; debemos tomar siempre como objetivo de lucha la aspiración del pueblo a una vida mejor, poner en efecto el propósito fundamental y línea de masas del Partido, respetar la posición protagonista del pueblo y respetar lo que en la actividad práctica constituya voluntad de las masas populares, experiencia creada por ellas, derecho suyo y papel desempeñado por ellas, estimulando plenamente la grandiosa fuerza creadora que subyace en ellas. A raíz del XVIII Congreso Nacional del Partido, su Comité Central, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, ha planteado la concepción del desarrollo centrada en el pueblo y la de los derechos humanos centrada en el mismo, manifestando con ello su clara posición del pueblo. Con la entrada del socialismo con peculiaridades chinas en una nueva era, la contradicción principal de la sociedad de nuestro país ha pasado a ser la que existe entre la creciente demanda del pueblo de una vida mejor y el desarrollo desequilibrado e insuficiente. El pueblo plantea demandas cada día más amplias en su búsqueda de una vida mejor, formulando no solo exigencias más elevadas en lo referente a la vida material y cultural, sino también exigencias cada vez más numerosas en varios ámbitos, entre ellos los de la democracia, el imperio de la ley, la equidad, la justicia, la seguridad y el medioambiente. Así que el secretario general Xi Jinping recalca la necesidad de que resolvamos esforzadamente las necesidades, preocupaciones y expectativas de las masas populares y demos pie a que compartan los frutos de desarrollo tocantes a las dimensiones económica, política, cultural, social y ecológica, y tengan una mayor, más directa y más real sensación de beneficio, felicidad y seguridad.

Hay que materializar de manera paulatina la prosperidad común de todo el pueblo desde la reafirmación en los derechos a la vida y al desarrollo como los primordiales derechos humanos básicos. Siendo el desarrollo un tema eterno de la sociedad humana, la Declaración sobre el Derecho al Desarrollo de las Naciones Unidas confirma el derecho a él como derecho humano inalienable. Para China, el mayor país en vías de desarrollo, el desarrollo representa la clave para solucionar todos sus problemas y también la tarea primordial de su gobernación y revigorización por parte del PCCh, y la buena solución del problema de alimentar a más de 1.400 millones de personas constituye la primera tarea de su desarrollo. Después del XVIII Congreso Nacional del Partido, su Comité Central, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, ha organizado y desplegado una guerra popular impetuosa de asalto de plazas fuertes en la liberación de la pobreza, de una magnitud sin precedentes y de la mayor intensidad y la más numerosa población beneficiada, situando el acometimiento de lo más duro en la liberación de la pobreza en un lugar destacado de la gobernación del país y el manejo de los asuntos administrativos, tomando la salida de la pobreza de todos los habitantes rurales necesitados como tarea de mínimos y jalón de la consumación de la construcción integral de una sociedad modestamente acomodada, con persistencia en actuar afinadamente en la prestación de ayuda contra la pobreza y en la liberación de la misma.La plenamente exitosa culminación de nuestra batalla de asalto de plazas fuertes en la liberación de la pobreza, operada en el importante momento de acogida del centenario de la fundación del PCCh gracias al esfuerzo conjunto de todo el Partido y el pueblo de todas las etnias del país, ha ocasionado otro prodigio humano que brillará por siempre en los anales de la historia, ha creado un ejemplo chino de gobernanza por la reducción de la pobreza y ha contribuido grandemente a la causa global del alivio de la pobreza y la de los derechos humanos. La eliminación de la pobreza absoluta constituye una gran medida impulsora de la prosperidad común del pueblo entero. El secretario general Xi Jinping señala que la prosperidad común es la demanda esencial del socialismo y el anhelo conjunto de las masas populares. Con la programación hacia un objetivo de mayor alcance, la V Sesión Plenaria del XIX Comité Central del Partido planteó el de “lograr avances sustanciales más palpables en la prosperidad común de todo el pueblo”. El secretario general Xi Jinping destaca que la prosperidad común es una importante característica distintiva de la modernización china; en la nueva expedición de la construcción integral de un país socialista moderno, hemos de situar en una posición aún más relevante el impulso de la prosperidad común del pueblo entero; y se efectúa con consciente y activa superación de las disparidades que haya entre las regiones, entre la ciudad y el campo, y en la distribución de los ingresos, con fomento de la equidad y justicia social, con gradual consecución de la prosperidad común de todo el pueblo, y con firme prevención de la polarización.

Hay que situar en primer lugar la seguridad vital y salud de las masas populares. La garantización de esta seguridad es una importante tarea de nuestro Partido para su gobernación del país y manejo de los asuntos administrativos, y también un importante contenido del respeto y garantía de los derechos humanos. Desde el XVIII Congreso Nacional del Partido, el secretario general Xi Jinping ha enfatizado varias veces la necesidad de que, con persistencia en considerar el ser humano como lo primordial y gobernar el país en bien del pueblo, se tome afianzamiento en la idea del desarrollo basado en la seguridad y se ponga siempre en primer plano la seguridad vital de las masas populares, y, con emplazamiento de la salud del pueblo en una posición estratégica de desarrollo preferente, se promueva la construcción de una China sana y se haga realidad un desarrollo virtuoso y coordinado de la salud con la economía y la sociedad. La epidemia de COVID-19 ha sido una seria emergencia de salud pública. Desde la fundación de la Nueva China, ninguna otra enfermedad se había propagado más rápido, extendido más ampliamente ni causado mayores dificultades a la prevención y el control. De cara a esta epidemia, el Comité Central del Partido, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, con planteamiento bien definido de poner en primer lugar la seguridad vital del pueblo y su salud, reunió a los médicos más sobresalientes, equipos más avanzados y recursos de urgente necesidad de todo el país, haciendo todo lo posible para el auxilio y tratamiento, cuyos gastos corrieron por cuenta del Estado. Recibió plena protección cada una de las vidas, desde bebés de tan solo 30 horas y pico a ancianos de más de cien años, y llegando hasta los extranjeros venidos a China, incluyendo los que aquí estudiaban, y hubo primoroso cuidado con la vida, el valor y la dignidad de las personas. El secretario general Xi Jinping indica que la vida es lo más valioso, solo se vive una vez, ya no se la puede recobrar una vez perdida. Para proteger la seguridad de la vida del pueblo debemos actuar a toda costa y estamos en condiciones de hacerlo, porque el propósito fundamental del PCCh es servir al pueblo de todo corazón, y porque nuestro país es una nación socialista cuyo dueño es el pueblo. Este espíritu de primacía de la vida encarna de manera concentrada la honda tradición de benevolencia propia del pueblo chino y de la búsqueda de valores de los comunistas chinos, la cual considera como centro al pueblo.

Hay que aumentar coordinadamente los derechos económicos, políticos, sociales, culturales y medioambientales del pueblo entero en promoción del desarrollo integral de las personas. La garantía de los derechos e intereses económicos, políticos, culturales y sociales de ellas, que es exigencia esencial del sistema socialista de nuestro país, es también la labor más importante y más fundamental para desplegar el entusiasmo, la iniciativa y la creatividad de su gran colectivo. El secretario general Xi Jinping indica que el objetivo fundamental de nuestro Partido al liderar al pueblo en la construcción integral de una sociedad modestamente acomodada y en la realización de la reforma y apertura, y de la modernización socialista, es el de, a través del desenvolvimiento de las fuerzas productivas sociales, elevar sin cesar el nivel de vida material y cultural de la población y promover el desarrollo integral de las personas. Él hace hincapié en la necesidad de impulsar con visión de conjunto la disposición general de un todo compuesto por cinco elementos ―la construcción económica, la política, la cultural, la social y la de la civilización ecológica―, promover coordinadamente la disposición estratégica de las “cuatro integralidades” ―integralidad de la construcción de un país socialista moderno, de la profundización de la reforma, de la gobernación del país según la ley y del disciplinamiento riguroso del Partido―, profundizar integralmente la reforma y la apertura, basarnos en la nueva etapa del desarrollo, aplicar completa, acertada y generalmente la nueva concepción del mismo, estructurar su nueva configuración, promover el desarrollo de alta calidad e impulsar la independencia y autosuperación en cuanto a ciencia y tecnología; sostener y perfeccionar el sistema de asambleas populares, impulsar un desarrollo de la democracia consultiva amplio, pluriestratificado e institucionalizado, propulsar el fomento de la democracia de los niveles de base, ampliar constantemente la participación ordenada del pueblo en la política, desarrollar la democracia popular de proceso entero y garantizar al pueblo la condición de dueño del país; desarrollar las actividades culturales y asegurarle al pueblo sus derechos e intereses en cuanto a cultura, de modo que disfrute de una vida espiritual y cultural más sustanciosa, más abundante y de mejor calidad; mejorar sus condiciones de vida en concomitancia con el desarrollo, ocuparnos de los problemas de los intereses que le son más preocupantes, inmediatos y reales, conseguir nuevos y constantes progresos en cuanto a que haya crianza infantil, acceso a los estudios, retribución por el trabajo, asistencia médica en la enfermedad, sustento en la vejez, un lugar donde vivir y ayuda a los débiles, impulsar sin pausa la equidad y justicia social, fortalecer e innovar la gobernanza social y salvaguardar la armonía y la estabilidad sociales, todo a fin de garantizarle al país un orden y una paz duraderos y al pueblo tranquilidad y satisfacción en su vida y en su trabajo; y persistir en la coexistencia armoniosa entre el ser humano y la naturaleza, responder activamente a lo que piensan y esperan las masas populares, y a lo que les apremia, promover enérgicamente el fomento de la civilización ecológica y proporcionar más productos ecológicos de calidad, satisfaciendo continuamente la creciente demanda del pueblo de un hermoso entorno ecológico. Después del XVIII Congreso Nacional del Partido, con mantenimiento y desarrollo del socialismo con peculiaridades chinas, el Comité Central, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, ha promovido el desarrollo coordinado de la civilización material, política, espiritual, social y ecológica, ha dado impulso sinérgico a que el pueblo lleve una vida holgada, que el país se haga próspero y fuerte, y que se construya una China bella, y ha podido satisfacer sin cesar las crecientes demandas materiales y culturales del pueblo, de manera que se le facilite una más sustanciosa, garantizada y sostenible sensación de beneficio, felicidad y seguridad.

Hay que asegurar los derechos e intereses de las minorías étnicas, mujeres, niños, ancianos, personas con discapacidad y otros grupos específicos. El sueño chino es el de la nación y el país, es el de cada uno de los chinos. Al culminar la construcción integral de una sociedad modestamente acomodada y alcanzar la construcción integral de un país socialista moderno, no puede faltar o quedar rezagado nadie. El secretario general Xi Jinping resalta que la diversidad y unidad de las etnias, que es una importante riqueza legada por nuestros antecesores, exije una aún mejor acción de mantenimiento de la unidad y estabilidad de las zonas étnicas y aceleración de su desarrollo, así como un perfeccionamiento de las políticas diferenciadas de respaldo regional y garantía legal de los derechos e intereses que asisten de por ley a las masas de todas las etnias, todo a fin de asegurar que las minorías étnicas y sus zonas culminen junto con el resto del país la construcción integral de una sociedad modestamente acomodada y la modernización; los derechos e intereses de la mujer son derechos humanos básicos, y los adolescentes y niños representan el futuro de la patria, así que perseveraremos en la igualdad de género como política estatal básica, garantizaremos los derechos e intereses legales de las mujeres y los niños, y completaremos el sistema de cuidados y servicios de atención; la vejez es una etapa importante de la vida humana, por lo que hemos de invertir esfuerzo en fortalecer la idea y mentalidad de respuesta activa de toda la sociedad al envejecimiento poblacional, mejorar la calidad existencial y vital de la gente de edad y defender su dignidad y sus derechos, todo ello en favor de facilitarle a la gente mayor sustento, apoyo, alegría y paz; y, siendo las personas con discapacidad miembros iguales de la gran familia social, debemos desarrollar en mayor medida la causa relativa a ellas, reforzar los servicios para su rehabilitación y completar sin cesar el sistema garantizador de sus derechos e intereses. Después del XVIII Congreso Nacional del Partido, su Comité Central, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, les ha dado a las diversas masas necesitadas una especial atención, amor y solidaridad, ha dado suma atención al aseguramiento de los derechos e intereses de las minorías étnicas, mujeres, niños, ancianos, personas con discapacidad y otros grupos específicos, y ha organizado y aplicado programas de desarrollo para mujeres y niños, o personas con discapacidad, o minorías étnicas, de manera que gocen de oportunidades equitativas para participar plenamente en la vida económica, política, cultural y social en pie de igualdad y compartan los frutos del desarrollo.

Hay que trabajar por una más fuerte garantía de los derechos humanos mediante el ejercicio del imperio de la ley en aseguramiento de legal disfrute de amplios derechos y libertades para el pueblo. El imperio de la ley constituye una garantía importante de los derechos humanos. El secretario general Xi Jinping indica que el objetivo fundamental de impulsar la gobernación integral del país acorde a la ley es la legal salvaguardia de los derechos e intereses del pueblo. Es necesario plasmar en el establecimiento de leyes, ejecución de estas, la administración de justicia y el cumplimiento de las mismas ―todos los eslabones― la concepción del desarrollo centrada en el pueblo; aligerar el paso en el perfeccionamiento de los sistemas jurídicos para que encarnen la equidad en derechos, oportunidades y reglas; garantizar la inviolabilidad de los derechos del ciudadano relativos a la persona física, a la propiedad y a la dignidad, y sus derechos políticos básicos, así como el ejercicio efectivo de sus derechos económicos, culturales, sociales, etc., y asegurar la igualdad de todos ante la ley. A partir del XVIII Congreso Nacional del Partido, su Comité Central, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, ha actuado en responder activamente a las nuevas demandas y expectativas de las masas populares; hacer un sistémico estudio, planificación y resolución de los problemas destacados del ámbito del imperio de la ley que suscitan fuertes quejas entre ellas; persistir en el impulso simultáneo de la actuación acorde con la ley en la gobernación del país, en el ejercicio del gobierno y en la gestión de los asuntos administrativos; mantenerse firme en la vertebración, como un todo único, de un Estado, un Gobierno y una sociedad regidos por la ley; impulsar sin interrupción el establecimiento científico de leyes, la ejecución rigurosa de estas, el ejercicio imparcial de justicia y el cumplimiento de las mismas por todo el pueblo; hacer presentar la plasmación de los intereses del pueblo, el reflejo de sus anhelos, la defensa de sus derechos e intereses, y la elevación de su nivel de bienestar en cada uno de los ámbitos y cada uno de los procesos de la gobernación del país acorde a la ley, y promover el respeto y la garantía reales de los derechos humanos, por que las masas populares perciban la equidad y la justicia en todos los sistemas jurídicos, todas las decisiones encaminadas a hacer cumplir la ley y todos los casos judiciales.

 

IV. Hay que impulsar el desarrollo de la causa mundial de los derechos humanos en promoción de formar una gobernanza global de derechos humanos más justa, razonable e inclusiva

El PCCh es un partido político que persigue la felicidad del pueblo chino, que lucha por la causa del progreso de la humanidad y que siempre toma el hacer nuevas y mayores contribuciones a esta como su propia misión. El PCCh y el Gobierno chino siempre enarbolan la bandera de la paz, el desarrollo, la cooperación y la ganancia compartida, persisten en la defensa de la paz mundial y la promoción del desarrollo conjunto, incentivan tenazmente con la cooperación el desarrollo y con él los derechos humanos, y participan completamente en la gobernanza global de derechos humanos, en un esfuerzo por impulsar el desarrollo y progreso de la causa mundial de los derechos humanos. En la novena parte del libro, el secretario general Xi Jinping hace profundas exposiciones sobre este tema.

Hay que defender y desarrollar los valores comunes a toda la humanidad y enriquecer la diversidad de la civilización humana. Los derechos humanos son la búsqueda común de toda la humanidad, y la comprensión de los pueblos de los diversos países sobre ellos no es del todo igual debido a diferencias en lo que respecta a cultura, sistema y camino. El secretario general Xi Jinping hace la indicación de que, en este rico y abigarrado mundo, es en la diversidad donde radica el encanto de la civilización humana y, más aún, la fuente del vigor y de la fuerza motriz del desarrollo mundial; que las diferencias no son en sí mismas nada de temer, pero sí lo son la arrogancia, los prejuicios y el odio, y lo son aquellos que pretenden clasificar a las civilizaciones humanas por jerarquía e imponer a los demás su propia historia, cultura y sistema social, y que China sostiene la necesidad de impulsar un mejor desarrollo de la causa de los derechos humanos en los distintos países reforzando el intercambio y mutuo aprendizaje de las diferentes civilizaciones y promoviendo su comunicación y cooperación al respecto. Él exhorta en muchos eventos internacionales a fomentar enérgicamente los valores comunes a toda la humanidad ―paz, desarrollo, equidad, justicia, democracia y libertad―, por ofrecer juntos una guía de nociones correctas para la construcción de un mundo más bello. Pone el acento en la idea de que tengamos en común como causa la paz y el desarrollo, como ideal la equidad y la justicia, y como aspiración la democracia y la libertad, y que, entendiendo magnánimamente la comprensión que del contenido de los valores tienen las distintas civilizaciones y respetando la exploración de vías que hacen los pueblos de los diversos países para materializarlos, plasmemos los valores comunes a toda la humanidad concreta y realmente en la práctica de llevar a concreción los intereses del pueblo del propio país.

Hay que ser siempre constructores y defensores de la paz mundial. La salvaguardia de la paz constituye la premisa del respeto y garantía de los derechos humanos. China toma como su propio deber sagrado la defensa de la paz mundial y el rechazo al hegemonismo y a la política de fuerza, y se opone resueltamente al uso arbitrario de la fuerza armada o amenaza de recurrir a ella en el trato de las disputas internacionales. El secretario general Xi Jinping señala la necesidad de una actuación en clave de respeto mutuo y consulta en pie de igualdad, de repudio resuelto a la mentalidad de la Guerra Fría y la política de fuerza, y de seguimiento de un nuevo camino en las relaciones interestatales, uno de diálogo, no confrontación, y de asociación, no alianza; en clave de tenaz acción solventadora de las disputas con diálogo y neutralizadora de las divergencias con negociación, de coordinado afrontamiento de las amenazas convencionales y no convencionales a la seguridad y de combate del terrorismo en todas sus manifestaciones, y en clave de atenimiento a un concepto racional, coordinado y equilibrado en cuanto a la seguridad nuclear para encauzar los procesos tocantes a ella por vía de un desarrollo sano y sostenido. A partir del XVIII Congreso Nacional del Partido, bajo la firme dirección de su Comité Central, nucleado en torno al camarada Xi Jinping, enarbolando la bandera de la paz, el desarrollo, la cooperación y la ganancia compartida, China sigue invariablemente el camino del desarrollo pacífico, impulsa activamente el establecimiento de relaciones de asociación global y participa con iniciativa en el proceso de la resolución política de los problemas internacionales candentes y difíciles. Y ahora China se ha erigido en el principal aportador de tropas y activos a las operaciones de preservación de la paz organizadas por la ONU, con sus más de mil oficiales y soldados, sin reparar en dificultades ni peligros, defendiendo la paz y la tranquilidad en las áreas donde se cumplen misiones de mantenimiento de la paz.

Hay que esforzarse por impulsar el desarrollo y la prosperidad comunes de todos los países. El desarrollo es la clave de la consecución de la felicidad del pueblo y cimiento importante para garantizar los derechos humanos. El secretario general Xi Jinping indica que un desarrollo común y sostenible es un desarrollo genuino y positivo. No es posible que el desarrollo a largo plazo del mundo se base en que un cierto número de países sean cada vez más ricos mientras otro cierto número permanezcan largamente en la pobreza y el atraso. El mundo podrá desenvolverse mejor solo cuando todos ellos logren un desarrollo común. Él sostiene la necesidad de permanecer adheridos al espíritu de apertura, promover la coayuda y el cobeneficiamiento, y bregar por un desarrollo equitativo para que el acceso a las oportunidades del mismo sea más igualitario y que sus logros beneficien en mayor medida y de forma más equitativa al pueblo de los diversos países, y, además, exhorta a la comunidad internacional a la afanosa apertura de un equitativo, abierto, integral e innovador rumbo de desarrollo. La agilización del proceso mundial de reducción de la pobreza y el apoyo al desenvolvimiento de los países en vías de desarrollo son contenido importante de la consecución del desarrollo común. El secretario general Xi Jinping señala que el pueblo de China siempre ha valorado la amistad, la responsabilidad, la fidelidad y la justicia, y su cultura siempre ha tenido una excelente tradición de auxilio a los necesitados y de gusto por hacer el bien y prestar ayuda a los demás, y el PCCh, que alberga hondos sentimientos hacia el pueblo tanto de China como de los otros países, desea crear bienestar no solo para el pueblo chino, sino también para todos los demás. A partir del XVIII Congreso Nacional del Partido, al plantear por primera vez la Iniciativa de la Franja y la Ruta y promover su construcción conjunta, nuestro país se ha dedicado a intensificar la cooperación internacional para el desarrollo, ayudando a los diversos países en cuanto al desarrollo a desplegar una acción de ruptura de cuellos de botella, reducción de disparidades y compartición de logros; al tiempo que dedica esfuerzos a la erradicación de su propia pobreza, siempre participa activamente en la cooperación Sur-Sur, promueve el establecimiento de unas relaciones de intercambio y cooperación de nuevo cuño para la reducción internacional de la pobreza nucleadas en torno a la cooperación y la ganancia común, y, en la medida de sus capacidades, brinda ayuda sin ninguna condición política adicional a otros países en vías de desarrollo, sobre todo los menos desarrollados, como apoyo y asistencia para que puedan extirpar la pobreza y lograr un desarrollo sostenible. En el debate general del 76.º periodo de sesiones de la Asamblea General de la ONU, el secretario general Xi Jinping dio un paso más al plantear la Iniciativa para el Desarrollo Global, enfatizando la adhesión firme a la prioridad del desarrollo, a la consideración del pueblo como el centro, al beneficio general y la inclusión, a un impulso hecho por la innovación, a la coexistencia armoniosa entre el ser humano y la naturaleza y a un guiamiento por acciones, todo por una más rápida implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas y por impulsar en común el desarrollo global hacia una nueva etapa de equilibrio, coordinación e inclusión, iniciativa que, obrando en acomodo a los temas principales de nuestro tiempo ―la paz y el desarrollo― y al vehemente deseo del pueblo chino de perseguir una vida mejor, ha brindado una guía de acción para un desarrollo convergente, solidario y conjunto de los diversos países y le ha inyectado fuerza motriz ideológica.

Hay que promover la formación de una gobernanza global de derechos humanos más justa, razonable e inclusiva, y estructurar conjuntamente una comunidad de destino de la humanidad. La humanidad comparte unas mismas penas y alegrías. Ante los problemas globales, China participa activamente en la reforma y la construcción del sistema de la gobernanza global y aboga por impulsar la democratización de las relaciones internacionales, todo con miras a defender conjuntamente la equidad y justicia internacional. Sobre la cuestión relativa a la causa de los derechos humanos, el secretario general Xi Jinping indica que es imperativo que se la promueva de acuerdo con las condiciones nacionales de los distintos países y las necesidades de su propio pueblo ―solo así podrá ello hacerse― y que se ejerza una resuelta oposición a las intromisiones sin escrúpulos en los asuntos internos de otros países so capa de la “democracia”, la “libertad” y los “derechos humanos”. Enfatiza una actuación que se adhiera a los valores comunes a la humanidad, salvaguarde la dignidad y los derechos de la gente y promueva la formación de una gobernanza global de derechos humanos más justa, razonable e inclusiva, que respete y refleje la voluntad del pueblo de los países en vías de desarrollo con base en un espíritu de justicia, equidad, apertura e inclusión, y que incentive el desarrollo con la cooperación y, con él, los derechos humanos, y todo ello en pos de estructurar en conjunto una comunidad de destino de la humanidad. Desde el XVIII Congreso Nacional del Partido, el secretario general Xi Jinping se ha pronunciado por una filosofía de desarrollo innovador, coordinado, ecológico, abierto y compartido, un concepto de seguridad común, integral, cooperativa y sostenible, y uno de civilizaciones fundado en la igualdad, el aprendizaje recíproco, el diálogo y la inclusión; por, de cara a la epidemia de la COVID-19, que amenazaba la seguridad vital y de salud de la humanidad, la promoción conjunta de la vertebración de una comunidad higiénico-sanitaria de la humanidad, habiendo propuesto una iniciativa de acción global de cooperación en vacunas, y, de cara al severo desafío que suponen para la subsistencia y desarrollo de la humanidad el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, el agravamiento de la desertificación y los frecuentes incidentes de clima extremo, por la conjunta conformación de una comunidad de vida entre el ser humano y la naturaleza, aportando la sabiduría china y el plan chino para la gobernanza global de los derechos humanos.

 

Fuente: Renmin Ribao, 12 de enero de 2022, sexta plana

版权所有中央党史和文献研究院

建议以IE8.0以上版本浏览器浏览本页面京ICP备11039383号-6京 公网安备11010202000010